PRI: Operación 010718

*¿CUAL SERÁ?

2° DE DOS PARTES

La guerra política electoral del próximo domingo en el Estado de México literalmente será casa por casa al estar prácticamente en juego parte de la elección presidencial del 2018 por lo menos para un grupo de poder que se juega todo, que si pierde, no tendrá mucho futuro para la elección presidencial, aunque eso no le quitara las ganas de insistir y continuar en el intento de derrotar a Peña Nieto como ha sido hasta hoy su proyecto. Se trata de ganar y en el peor de los casos no tener tantas perdidas como les ha ocurrido hasta hoy.

El bloque anti Peña han sido duramente golpeados y van de nuevo a otra confrontación por lo que intentaran con todo detener la ofensiva buscando que el PRI tropiece a como dé lugar.

Por el otro lado el bloque a favor de peña nieto continuara con la idea de la restructuración del país que han emprendido y seguirán buscando crearse mejores condiciones para cambiar las circunstancias de los monopolios nacionales que creo el salinato desarrollando competencias en todos los ámbitos mediante la construcción de alianzas económicas transnacionales y multinacionales.

Debemos ubicarnos con precisión. La disputa es global y la lucha política terrenal y cotidiana que se dirime en las urnas, espacio reducido donde el ciudadano define su futuro y para el que la comunicación particularmente y la organización política son vitales. Por eso quien incline a su favor el resultado este domingo será quien mejor haya equilibrado esos dos factores.

Hasta ahora el peñanietismo viene siendo derrotado por el espectro negativo que le han construido en el imaginario social, donde aparece, según estudios estadísticos, con un rating muy bajo, como una manifestación de rechazo de la población pero que sin embargo eso no le resta a lo que suma con el poderoso resorte políticos que opera en los estados a favor del PRI y que seguramente lo harán por su candidato presidencial.

A ello se debe agregar también que el PRI viene trabajando una reorganización completa en todas las entidades que culminara en su asamblea nacional del 11 de agosto próximo cuando lanzara su plataforma que fundamentara en dos ejes: la reorganización electoral del partido y la propuesta de acuerdo conEstados Unidos y Canadá, el nuevo TLC.

Seguramente la reorganización se dará a partir del nuevo mando nacional del PRI que tendera a ser reforzado, seguramente con un secretario de estado, donde se apunta como el más probable al secretario de gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong.

Reorganización que seguramente propondrá nuevos métodos para el lanzamiento de sus candidatos a todos los niveles del país, un método de selección que le permita al PRI refrescarse y no volver a cometer los errores del 2016, cuando palomearon a todos sus candidatos a gobernador y así les fue.

Por otra parte seguramente se va reforzar ideológicamente reelaborando su programa con las reformas estructurales de las que hará un balance y ponderara sus logros.

Por ultimo desde la presidencia de la republica tendrán la oportunidad de organizar el debate sobre el TLC que también dará inicio en agosto con la idea de buscar un realineamiento programático y de política económica con los empresarios mexicanos ante la nueva relación que se dará con Estados Unidos y Canadá a partir del 2018, como ya lo hacen de alguna manera los grupos empresariales que declaran su rechazo total a un gobierno populista. Eso creo.