Culiacán en la mira
¿De qué se trata?
Además de los problemas de Culiacán, algo más debe estar preocupando al presidente municipal de Culiacán, Jesús Valdés, después de tanto ataque de los últimos días, que hasta un bache se convierte en nota de primera plana, como si hubiera un plan premeditado en su contra o exigencias inmediatas de alguien que le cumpla.
Pareciera que así son las cosas porque resulta inexplicable que se magnifique tanto algunos problemas menores tan solo con la intención de golpear.
Es indiscutible que Jesús Valdés pretenderá reelegirse tanto porque es la primera vez que se ejercerá este derecho, como por lo limitado del espacio de su actual gestión que apenas rebasará el año cuando tenga que solicitar su licencia para competir electoralmente, lo que amerita extenderse, más aún cuando existen proyectos estratégicos tan importantes y trascendentes como el tren ligero, el circuito circunvalación y los puentes y pasos para eficientar el tránsito vehicular.
Lo extraño de estos ataques es la coincidencia que han tenido los principales grupos de poder en combatir al primer edil de Culiacán aun cuando estos han manifestado casi siempre encontrados intereses en la disputa estatal.
¿Qué ha hecho Jesús Valdés para merecer tal ofensiva? Seguramente no se trata de su gestión porque si así fuera, los señalamientos periodísticos y ataques se dieran sobre esas decisiones y no sobre asuntos menores o ajenos a su gestión, como así ha ocurrido.
El problema de los baches, las fallas en algunas partes de los reencarpetados recientes, así como la demanda sobre el conflicto añejo del parque “Jimmy Ruiz” que exigen indemnizaciones, no son cosas que lo ameriten y por ello mismo la intriga es obvia a la que habrá que encontrarle respuesta y asumir que van a continuar.
Con esta ofensiva quizá también puede estar dándose el chantaje económico por canonjías de intereses empresariales que a veces suceden con algunas autoridades por algunos negociantes, pero lo más probable es que se trata de impedir la posible reelección de Jesús Valdés en la presidencia de Culiacán.
El hecho de que los grandes grupos de poder coincidan en esta ofensiva contra Jesús Valdés es un asunto de política estatal de enorme trascendencia que debe preocupar no solo al alcalde de Culiacán, sino a todos los culichis por todo lo que oculta y entraña una ofensiva de estas características.
Digo lo anterior porque pareciera que estos juegos de poder y trapacerías políticas se pueden imponer por encima de todos sin importar nada ni nadie más que sus intereses mezquinos. Ojalá se transparentara. ¡Para saber!