Al Gobernador… No le buigan
*Puede ser peor
Al gobernador de Sinaloa solo le faltaba perder la compostura como es la burla que ha hecho a la ciudadanía cuando anunció el viernes pasado que ya no habría impuesto de la tenencia vehicular y ahora descubrimos que en la iniciativa de ley de ingresos y presupuesto de ingresos del Gobierno del Estado para el 2018 ha propuesto que el cobro del renglón “refrendo vehicular” se eleve de 500 pesos a 1300 pesos, con el agravante de que la tenencia se aplicaba parcialmente a los vehículos más costosos y ahora todos tendrán que pagar el refrendo vehicular.
De golpe Quirino Ordaz, con sus genios financieros en su cabecera, ha lanzado la peor ofensiva de su gobierno contra la población, proponiéndose, según el maestro y politólogo Diego Angulo, cambalacharnos los 400 millones de la tenencia por los 1500 millones de pesos que ahora cobrará por el refrendo vehicular. Antes solo 400 mil vehículos pagaban tenencia ahora un millón ciento 70 mil vehículos pagarán el refrendo vehicular.
El gobernador quitó el impuesto de la tenencia supuestamente por las protestas e inconformidades que había expresado la población, pero como “el borras”, arremangó con todos para no dejar a nadie sentido y todos le repongan lo que dejó de recibir por la tenencia y todavía mucho más.
Van a ser 1000 millones de pesos más los que obtendrá el Gobierno del Estado y la pregunta que todo mundo se hace es ¿Por qué?¿A cambio de qué?, y la respuesta de todos es, ¡de nada por supuesto!
Desde hace ya más de 10 años se ha calculado que el mejor negocio que tiene el gobierno de Sinaloa es el parque vehicular de cuyos dueños obtiene anualmente por la venta de licencias, placas y multas, la friolera de casi tres mil millones de pesos, que ahora se incrementará por este famoso refrendo a más de 4 mil.
¿Conoce usted algún impuesto u otro ingreso propio del Gobierno del Estado que le acerque a esta descomunal fortuna que le proporciona el parque vehicular sinaloense? ¡No lo hay por ningún lado!
Ahora resulta que los nuevos salvadores de la patria chica en lugar de pugnar porque el Gobierno Federal realice un reparto más justo del ingreso fiscal nacional, dejan eso de lado por completo y lo único que se les ocurre es “clavarle la uña” a los ciudadanos.
Tan solo el ingreso fiscal que el pueblo de Sinaloa aporta a las arcas del Gobierno de la República oscila alrededor de los 130 mil millones de pesos de, los que tan solo retornan a nuestro estado vía participaciones federales y programas de Gobierno Federal 40 mil millones, quedando el 75% en la Hacienda Federal, recursos que aún se pueden repartir al estado y los municipios pero ni el gobernador, ni los diputados y tampoco los presidentes municipales se atreven a exigir.
Pero eso sí, el infeliz automovilista es la presa fácil y hay que seguirle esquilmando. Parece que no son suficientes los 7 mil millones de pesos que los autos en Sinaloa pagan por IEPS (Impuestos Especiales a Productos y Servicios) a la gasolina y de los cuales 700 millones se embolsa el Gobierno del Estado y la pregunta es de nuevo ¿qué hacen con tanto dinero?, ¿Dónde y en que lo inventen? Como dice mi amá, “que Dios nos proteja”.