top of page

POSTS RECIENTES: 

SÍGUENOS:

  • Facebook Clean Grey
  • Twitter Clean Grey

El hartazgo

Porque ni en sus propias encuestas levantan, como que a los altos mandos del Partido Revolucionario Institucional les comienza a caer el veinte de que para ganar la elección presidencial necesitarán casi un milagro, además de las tradicionales mapachadas.

El amplio rechazo en contra del PRI no solamente está firme, sino que crece.

Los gasolinazos y demás golpes al bolsillo popular siguen rebosando la paciencia popular, por más campañas negras y memes en los que nos dicen que Andrés Manuel López Obrador es peor que tener hemorroides y diarrea, al mismo tiempo.

En Los Pinos y en la dirigencia nacional del exinvencible partido resultan insuficientes los kleenex, y es tanta la lloradera que los afanadores tienen que trabajar horas extras en la trapeada de oficinas y pasillos.

No sabe la gente si ponerse a reír o a llorar, con el presidente Enrique Peña Nieto dándoles bola a los actores de telenovelas, al borde de las lágrimas ante la incomprensión social y lo poco que algunos mexicanos lo quieren.

Son los efectos de una realidad que los abruma y que les resulta inexplicable, no sabemos si por ciegos o por cínicos.

La campaña priísta es un desastre, y la candidatura del ciudadano José Antonio Meade Kuribreña sigue sin prender.

Los rumores de que habrá un emergente cobraron tanta insistencia que la segunda al mando nacional en el PRI, Claudia Ruiz Massieu, tuvo que salir a rechazar que Meade vaya a ser sustituido como candidato presidencial.

Acusó que los adversarios políticos esparcieron ese rumor para confundir, según ella apanicados por el tremendo arrastre popular del exsecretario de Hacienda.

Más complicada y cuesta arriba no puede estar la elección presidencial, pues una investigación del gobierno encontró que una importante mayoría de los ciudadanos desean que los gobierne cualquier partido político, menos el PRI.

La confirmación de millones de votos de castigo en contra de malos gobiernos priístas que en lo federal y en algunas entidades federativas se han caracterizado no solamente por su ineficacia sino principalmente por sus corrupciones.

Otra perspectiva de pesadumbre tricolor es la de derrotas en las ocho elecciones para gobernador que se tendrán en la elección de julio.

La coalición encabezada por Morena aparece adelante en la Ciudad de México, Veracruz, Puebla, Chiapas, Tabasco y Morelos, mientras que la alianza PAN-PRD-MC aventaja en Guanajuato, y el Movimiento Ciudadano, que va solo, lo hace en Jalisco.

El PRI aparece en esas entidades con tres segundos lugares, cuatro terceros y una cuarta posición.

Terrible y sombrío, por donde quiera que se le vea.

La convicción de tan difíciles escenarios está obligando dentro del Revolucionario Institucional a la redefinición de algunas candidaturas para diputados federales y senadores.

El optimismo exagerado que algunos mostraban terminó rebasado por la cruda realidad, y recobra terreno la advertencia ineludible de las candidaturas rentables.

Candidatos que sumen votos, pero de verdad.

Revivir la simulación retórica que terminaría otra vez con cuates y cuotas en las candidaturas, llevará al PRI a un lejano tercer lugar en las votaciones.

En ello, el dilema de dar pie a los revanchismos y a las confrontaciones, o buscar cuando menos por ahora la conciliación y la unidad.

No resultará fácil para ese partido enfrentar el hartazgo de buena parte de la sociedad.

Por algo, hay quienes desde ya señalan que en esta guerra electoral tendrán que emprender la cruzada del voto cruzado: que no voten por Meade Kuribreña, pero que lo hagan a favor del PRI en los demás puestos de elección popular.

Que si pierden la presidencia, lo que parece inevitable, que ganen o queden con mucha fuerza en el Congreso de la Unión, además de los cargos públicos locales.

De lo perdido lo recuperado, dicen.

TRES, DOS, UNO…

Por lo que toca a Sinaloa, a propósito de candidaturas, regresó de la madre patria el gobernador Quirino Ordaz Coppel, y se vuelve a calentar el ambiente.

Nombres van y vienen, en medio de las negociaciones y de los jaloneos y las disputas entre los grupos de poder.

La misma disyuntiva de los cuates y las cuotas, de las candidaturas rentables como puro discurso, o la aceptación de que solamente con unidad hay posibilidades de triunfo.

Se va a saber.


Ancla 1
bottom of page