Buscan garbanceros vender directamente a compradores extranjeros

Productores agrícolas de garbanzo acordaron trabajar en el acopio del grano en bodegas de las asociaciones de agricultores afiliadas a la Caades para empujar al alza del precio de la tonelada de garbanzo, que actualmente no llega a los 17 mil pesos, cifra muy por debajo del precio que obtuvieron el año pasado, que fue de 30 mil pesos.

En reunión que sostuvieron en Gobierno del Estado, los productores, en su mayoría del municipio de Angostura, afirmaron que el garbanzo de Sinaloa es el mejor garbanzo del mundo, lo cual es una ventaja competitiva para mejorar e precio que pretende fijar los intermediarios “coyotes”, que ronda entre los 13 mil y los 14 mil pesos.

La solución, dijeron, es acopiar el garbanzo y de ser necesario darle un valor agregado, y con ello se obligará a los intermediarios a mejorar sus propuestas de compra.

Las condiciones del mercado, dijeron, están para que el precio no sea por debajo de los 20 pesos.

Funcionarios del Gobierno del Estado, que estuvieron presentes en la reunión, como la directora de Comercialización de la Secretaría estatal de Agricultura, Carolina Sánchez, recomendaron que sean los mismos productores de garbanzo los que se sienten a negociar el precio con los compradores.

Incluso ofrecieron integrar una comisión que pueda viajar a Europa para buscar la venta directa en los países que son importadores tradicionales de garbanzo, tales como España, Argelia y otras naciones.

Lo único que falta, se les dijo a los productores, es que se definan los costos que se tendrán en acopiar el garbanzo, elaborar sacos de 25 kilogramos y llevarlos al puerto de Mazatlán para de ahí enviarlos a los países compradores.

Esta reunión del producto garbanzo se prolongó por varias horas dada la insistencia de productores y productoras de que ahí mismo se les fijara un precio mayor de 20 mil pesos, a pesar de que los mismos representantes del Gobierno del Estado les explicaron que por ser funcionarios no están en condiciones de imponerle precios al mercado ni obligar a los compradores a que compren a determinado precio.

Lo que sí se puede hacer, les dijeron, es sentarlos con los compradores para que negocien directamente, y a final de cuentas fue esta la propuesta que se aprobó, con la idea de darle vida a una nueva organización que opere de manera similar a la desaparecida Unión Nacional de Productores de Garbanzo.