El 2° debate
Mas propuestas
En un formato inédito para la vida política mexicana, los candidatos presidenciales se volvieron a encontrar en el segundo debate y aunque hubo más ideas y propuestas, de nuevo, sobre el tema central no hubo contexto ni circunstancias, como el caso del TLC que hace 25 años se firmó y fue en un contexto y una dinámica y condiciones socioeconómicas muy distintas y distantes a las actuales, o el caso de la relación bilateral entre los gobiernos estadounidense y mexicano, la cual tiene ya más de dos siglos, y en tercer lugar la historia de la frontera con Estados Unidos que dibujó Porfirio Díaz con aquella frase “pobre México, tan lejos de Dios y tan cerca de Estados Unidos” y en tercer lugar el significado de las migraciones, en particular la de los europeos a América y la de los latinos a Estados Unidos.
Lamentablemente todos los candidatos quedaron cortos en los temas y más de uno se perdió en los temas o fueron insulsos en sus respuestas, cuestión que preocupa por que, gane quien gane, ese nivel de conocimiento de estos tres grandes temas que se plantearon es de preocupar ya que no es posible que aspiren a dirigir el país con tanta ignorancia sobre esos temas torales.
El TLC entró en operaciones el primero de enero de 1994 en los años previos los temas se discutieron y quedaron muchos pendiente y otros en desventaja evidente como el tema de la agricultura, los salarios y la asimetría económica, como lo atestiguó el icónico Cesar Chávez líder de los jornaleros agrícolas en Estados Unidos la crítica de la AFL-CIO que acusó competencia desleal de las empresas mexicanas por los bajos salarios y el plasmar en el papel que los mercados eran libres cuando la productividad y desarrollo industrial y tecnológico tenía una disparidad de setenta a uno.
La segunda cuestión es el caso de las relaciones bilaterales de México con Estados unidos, plagado de episodios traumáticos para México donde siempre la presión y el chantaje han sido la moneda de cambio bajo la lógica de los gobiernos estadounidense siguiendo los dictados de la “doctrina Monroe” de “América para los americanos” y los gobiernos mexicanos siguiendo los dictados de la “doctrina estrada” de “libre autodeterminación de los pueblos”
Ahora con Donald Trump no es distinto, la agresión y el chantaje a la orden del día como ha sido con todos. ¿Cómo no recordar la agresión de Reagan que cerró en 1985 media frontera? O la operación del coronel Oliverth North que aliados con el narcotráfico mexicano operó desde aquí el apoyo a la “contra” nicaragüense, o el aval al fraude histórico de 1988 y al gobierno de salinas o los 900 kilómetros de muro que construyo Bill Clinton en el 2004 ¿Cómo cambiar eso?
Y la tercer cuestión que debieron abordar es la relativa a ¿Cómo se construyó nuestra frontera con Estados Unidos?¿cómo se pobló y desarrolló?, pues a partir de 1977 cuando el gobierno mexicano aprobó el primer programa de desarrollo en la zona fronteriza creando zona libres de impuestos y exenciones múltiples para poblar, resultando el TLC el gran motor que provocó la “maquinización” de la frontera y su industrialización a partir de infraestructura carretera, trenes, energía y desarrollo científico y cultural, convirtiendo a Baja California, Sonora, Chihuahua, Coahuila, Nuevo León y Tamaulipas en las entidades más desarrolladas y ricas del país.
¿Por qué los candidatos siguen pensando, como AMLO y Anaya, en más exenciones y beneficios a la frontera norte siendo ahora la zona más productiva y que realiza el 50% de las exportaciones del país? ¡Seis estados producen más exportaciones que las 26 entidades restantes! ¿Cómo se lo explica usted?
Y en el mismo tema de las fronteras, tratados y migración, no se toca como debiera el caso de Centroamérica, proponiéndose sólo ayudar a los migrantes sin pensar que esa región necesita más desarrollo como varios estados mexicanos, es decir, inversión, como ocurrió en Europa con la nueva Unión Europea, cuando ayudaron a los países más pobres, como España, Portugal y Grecia, que les ayudaron con 30 mil millones de dólares a cada uno para equilibrar el desarrollo económico. Las migraciones, habiendo pobreza, seguían existiendo, como aquí en México que hace 30 años el 70% de la población vivía en el campo y el 30% en las ciudades, ahora es el 20% en el campo y el 80% en las ciudades.
Es cierto, los temas son muy complejos, pero mínimo quienes aspiran a dirigir el país debieran tener una visión más completa y si se les prende el foco hacer propuestas coherentes y congruentes con nuestra realidad. Que así sea.