Sesenta mil fregada : Autoparlante
Altoparlante
Setenta mil fregadas
Por Juan Manuel Partida Valdez
Interesantes reflexiones con un buen amigo y colega respecto de la responsabilidad que como medios y periodistas tenemos ante la sociedad.
La contradicción de ver a los adoradores de la 4T exigir frente a los críticos un periodismo “imparcial”, mientras el mesías exige abiertamente que medios y periodistas se pongan de lado de la transformación que dice encabezar.
Son tiempos de definiciones, ha dicho repetidamente en tono de amenaza y en su diario linchamiento nacional contra periodistas a los que ha tachado de difamadores, hampones, corruptos y mafiosos, y en su generalización frente a “los que antes callaron como momias y ahora gritan como pregoneros”.
Como es natural, tenemos medios y periodistas abiertamente críticos, otros decididamente omisos y hasta cómplices, y muchos que prefieren nadar de muertito.
Mi reconocimiento a todos los que, desde su ámbito, señalan con valentía lo que no se hace bien o lo que se deja de hacer.
No es fácil hacerlo en una dictadura como la que vivimos.
Para quien esto escribe, el periodismo implica no solamente informar sino también formar opinión, y consideramos absurda la recurrente exigencia chaira de que seamos “justos”, repartiendo por parejo las críticas entre todos los colores.
En las principales democracias del mundo, los medios de comunicación y periodistas suelen tener participación abierta a favor o en contra de candidatos y partidos.
Los asuntos de la política terminan siendo de la sociedad, y un periodismo que no entienda esto deja de cumplir buena parte de su función social.
Los que prioricen los intereses económicos, muy su derecho y su gusto.
Quienes nos dedicamos a esta tan noble profesión tenemos la responsabilidad y la obligación de señalar con argumentos lo indebido y lo ilegal, trátese de quien se trate, guste o disguste.
No estamos para complacencias.
Los actos de fe son de los fanáticos y los abyectos, y los comunicadores los tenemos que eludir.
De mi parte, reitero mi decisión y mis esfuerzos para que lo injusto no nos resulte indiferente.
Que ningún político nos mienta, nos robe y nos mate; pero si lo hace, que no escape a la crítica.
De las descalificaciones y mentadas, me seguirán valiendo setenta mil fregadas.
¿DESPOJO EN PUERTA?
Lucila Ayala de Moreschi denuncia que en Redes Sociales Progresistas le quieren despojar de la candidatura por la gubernatura.
Que le hacen camino de regreso a Gerardo Vargas Landeros, lo que de ser cierto implica que no tiene futuro su aspiración para convertirse en candidato de Morena a la presidencia municipal de Culiacán.
Qué falta de seriedad, la neta.
MAROMA MAZATLECA
Ojalá que alguien termine dando por fin una explicación convincente de cómo es que el PAS tiene a su favor la definición del candidato a presidente municipal de Mazatlán, pero el plan que se mantiene es el de postular a un morenista.
Una candidatura del Partido Sinaloense, pero de mentiritas.
El supuesto de que les van a dar postulaciones por montones, pero con el acuerdo de “ceder” varias de ellas.
Una maroma indigna la del puerto, porque Luis Guillermo Benítez Torres enfrenta una condena del tribunal electoral que lo inhabilita para contender por cualquier cargo de elección popular.
O se trata de otro burdo engaño que nos traería una definición diferente previamente pactada en lo oscurito, o el plan es el de doblar a la “justicia” para favorecer al químico.
VACUNACIÓN IRRESPONSABLE
Información muy preocupante la de que en cuatro estados de la república encontraron dosis contra covid en mal estado.
Existe evidentemente un pésimo manejo de las vacunas, y seguramente se han aplicado inyecciones que al no cumplir con sus condiciones de temperatura sirven solamente para dos cosas: para nada y para engañar al pueblo y en particular a quienes son falsamente inmunizados.
EL DESVERGONZADO “SALVADOR”
Pronto cumplirá dos y medio años siendo presidente de la república, y Lopitos salió ayer con la dizque muy buena noticia de que “pronto” tendremos los medicamentos que tanto nos han hecho falta.
Tras miles de muertes como consecuencia de su criminal necedad, el hipócrita mayor se nos presenta otra vez como el salvador y el benefactor nacional, en el tan repartido atole del falso héroe cuatroté.
El chimoltrufio, que antes acusó reiteradamente que lo de la falta de medicinas eran puros inventos de sus adversarios empeñados en atacar a la cuarta transformación.
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